INTRODUCCIÓN
Escogí “Por cuatro esquinitas de nada” por
varias razones, primeramente porque es un libro que conocía de varias ocasiones
y me había llegado muy dentro sin lugar a dudas. La primera vez que lo escuché,
fue en el curso de monitores en la clase de diversidad funcional, en este caso
fue en formato digital, el cual, me impresionó los valores que llega dar un cuento de tan corta duración. Posteriormente, lo había escuchado en otras
ocasiones, pero la segunda vez que más me impactó y es más, pude ver la
respuesta en los niños, fue en las prácticas, en el cuentacuentos. La educadora
que lo estuvo narrando, lo hizo tan bien, que los niños le pedían todo el rato
que lo volviera a contar, y en varias ocasiones, esta misma, les preguntó qué
opinión tenían sobre Cuadradito y sus amigos.
“Cuatro esquinitas de nada”, cuenta la
historia de Cuadradito y sus amigos, Redonditos, que juegan y juegan, hasta que
se tienen que ir a casa, allí se dan cuenta, que todos los Redonditos, son
capaces de entrar menos Cuadradito debido a su forma y a la forma de la puerta. El cuento va
desarrollando las ideas que se les ocurren a todos, hasta que por fin
Cuadradito consigue entrar en la casa y jugar con sus amigos.
Para conocer mejor de dónde viene este
maravilloso cuento, hay que hablar de Jérôme Ruillier un escritor e ilustrador nacido
en 1966 en Madagascar, es marido de la famosa ilustradora y escritora, Isabelle
Carrier. Este cuento está inspirado en su hija que tiene Síndrome de Down, para
que sepa que no siempre lo diferente es malo, y en mi opinión, lo consigue a la
perfección.
La edad en la que me baso para hacer el
análisis es de 4 a 5 años, es decir, en el segundo curso del segundo ciclo de
educación infantil. La edad elegida me sugiere que los niños son capaces de
ponerse en el lugar de Cuadradito, y saber aceptar y amoldarse a lo diferente.
Pero sin embargo, lo trataremos a lo largo del análisis, desde un punto más
psicológico.
FICHA
BIBLIOGRÁFICA
Título:
Por cuatro esquinitas de nada
Ilustrador:
Jérôme Ruillier
Editorial:
Juventud
Fecha
1ªedición: 2004
Edad en la que me baso
para realizar este análisis: 4-5 años
El
aspecto externo del libro es atractivo, con colores vivos, pero simple, que
bajo mi punto de vista, menos es más. En cuanto a la manejabilidad para
niños de cuatro y cinco años es perfecta, ya que es un libro cómodo para ellos,
ya que es cuadrado con la portada es
dura y plastificada, por si en algún momento se moja o se cae, el libro
tenga la suficiente dureza para aguantar las dificultades. En cuanto al grosor
de las páginas, es verdad que no son muy gordas, pero sin embargo, los niños de
esta edad, tienen el cuidado suficiente para tratar el libro con delicadeza.
Las
ilustraciones son muy gráficas y simples al mismo tiempo, ya que únicamente
se muestra a Cuadradito y a los Redonditos, no obstante, son ilustraciones que
hacen ver al niño fácilmente, lo que está ocurriendo, es decir, refleja lo
relatado. Al ser con colores atractivos, hace que estos se fijen más en lo que
está pasando.
La
tipografía, es simple, de tamaño mediano y no hay mucha letra por página.
Esto hace que los niños sean capaces de seguir, sin estar leyendo, la historia
del cuento. Esto explica, por una parte que el libro es adecuado a la edad de
cuatro y cinco años, porque estos, todavía no conocen la lectoescritura a la perfección,
y como se ha dicho anteriormente, el conjunto de las ilustraciones, los colores
y la tipografía hace que ellos mismos sepan cuál es el problema, sin que nadie
se lo esté contando, como moraleja, ni como uso didáctico, y lo más importante,
sin tener la lectura dominada.
CONTENIDO
Hay
muchísimos temas para analizar en este bonito cuento, pero sin embrago, vamos a
empezar a sacar los más importantes.
El
tema principal de “Por cuatro esquinitas de nada” es la resolución de
problemas, ya que al no poder entrar Cuadradito en la casa, es el problema de
todos los que están, tanto para Cuadradito como para los Redonditos que no
pueden gozar de su compañía. Por lo que, todos juntos intentan resolver el
problema con diferentes formas, hasta que consiguen su propósito. En la edad de
cuatro y cinco años, los niños empiezan a resolver conflictos por ellos mismos.
Ya que la exigencia en hacer algo en estas edades, según la psicología
evolutiva, es meramente interna y por lo tanto en conflicto está en el propio
niño, entre lo que desea y lo que no puede ver, esto supone un logro en la
autonomía afectiva, y conlleva a la
búsqueda de otros caminos más elaborados y sofisticados para tenerla. (C. Escudero, 2012)
Los
temas secundarios son múltiples, por lo que vamos a empezar por la
empatía, la empatía, como bien todos sabemos es ponerse en el lugar del otro,
esto se ve muy acentuado ya que todos los Redonditos, se ponen en el lugar de
Cuadradito, para ver cómo se siente y
así consiguen ayudarle. Es verdad que los niños a esta edades son egocéntricos,
y esto retarda la empatía, pero sin embargo, estudios afirman que alrededor de
los cuatro años, son capaces de diferenciar dos realidades: la física y la mental
y también son capaces de separar las mentes: la de uno mismo y la del otro (Papalia,
Wendkos Olds & Duskin Feldman, 2001). Por lo que este tema, les viene muy
bien para seguir desarrollando la empatía, y para saber ponerse en el lugar del
compañero y ayudarle con toda dificultad.
Otro
de los temas destacados es la solidaridad, es decir, la toma de conciencia de
las necesidades de los demás y el deseo de contribuir y de colaborar para su
satisfacción. En el cuento se ve como los Redonditos se dan cuenta de la
necesidad de Cuadradito de entrar y hacen lo que se pueden para que este lo
realice y se sienta bien. En la edad de cuatro y cinco años este tema sí que se
está muy acentuado, porque en los colegios, se desarrolla y se fomenta desde
edades tempranas. Con el mismo argumento, nos encontramos con otro tema
secundario, que es el trabajo en equipo, ya que es algo que desde muy pequeños
se nos ha sido inculcado, aunque como todo, dependiendo de la persona le ha servido
o no, pero en cuatro- cinco años, este cuento
les va a hacer ver que al final, trabajar en equipo, tiene más ventajas
que si se trabaja en solitario.
La
frustración es una sensación de desagrado debida a un bloqueo u obstáculo en la
obtención de deseos, metas o necesidades. (Alonso, 1998). Por lo que para mí sería
otro de los temas secundarios a destacar, ya que en el cuento se ve cómo
Cuadradito se frustra por no llegar a ser como los Redonditos, que se podría
reflejar cuándo los niños quieren algo, pero no pueden hacerlo y se terminan
bloqueando. Otros temas secundarios podrían ser la amistad y la igualdad.
La
estructura del
cuento en mi opinión es la acertada para los niños de 4 y 5 años, ya que es
lineal, es decir, tiene una introducción, un nudo y un desenlace. Al principio
se plantea como todos están jugando juntos, continúa con el conflicto, el cual
representa como Cuadradito no puede entrar en casa de los Redonditos y por lo tanto, se les van
ocurriendo diferentes técnicas para resolver el conflicto. Y al fin y al cabo contando
las cuatro esquinitas de la puerta, Cuadradito, consigue introducirse con sus
amigos en la casa.
Como
he dicho antes, a mi parecer, la estructura está bien elegida porque los niños
pueden seguir la historia sin perderse y prestando la máxima atención.
El
protagonista de esta historia es Cuadradito, del cual se podrían identificar los niños, ya
que se podrían encontrar en la misma situación, también la forma de hablar es
muy similar que la suya por lo que parece muy fácil entender el significado de
lo que está ocurriendo. Pero no obstante, es activo, con iniciativa y
constante, ya que nunca se da por vencido para entrar por la redonda puerta.
Transmite motivación y perseverancia, para que las dificultades nunca hagan que tiremos la toalla.
Los
personajes secundarios son los amigos Redonditos, los cuales ayudan en
todo momento a Cuadradito para que consiga su objetivos. Por lo que estos
personajes, son activos, solidarios y
empáticos. En cuanto al rol que podrían representar en el niño de cuatro y cinco años, es de amigo, el cual
ayuda y conoce a su compañero para que siempre se encuentre bien.
Los
valores que ofrece este cuento implícitamente son la amistad, la
perseverancia, la constancia, el compañerismo, la empatía y el trabajo en
equipo. En cuanto a la edad de cuatro y cinco años, estos valores son
importantísimos para los niños, porque son los que están aprendiendo a
dominar y a tratar. En mi opinión, los más
importantes son la empatía, ya que como se ha dicho anteriormente, el ponerse
en lugar del otro, está comenzando a dar sus frutos. Quizá el valor que no veo
adecuado para esta edad es la perseverancia, ya que es algo que ellos mismos, no
saben los que es, que nunca se han esforzado por nada, ya que todo, y más en
esta sociedad, se le viene dado. Pero sí que es verdad, que deben saber que
quien algo quiere, algo le cuesta, y el esfuerzo siempre será recompensado.
Los
contravalores en el cuento, en mi opinión son complicados y por ello, me
ha costado reconocerlos, pero tras leer y releerlo me he dado cuenta de uno
principalmente. Este contravalor, es la
obsesión de Cuadradito en cambiar su forma de ser, para adaptarse a las de
los Redonditos, en vez de quererse a sí
mismo.
Por
último, el lenguaje y el uso de la lengua que utiliza Jérôme Ruillier, es sencillo y fácil de
comprender para los más pequeños. En la edad de cuatro a cinco años, el hecho
de que tenga exclamaciones e interrogaciones hace que los niños a la hora de escucharlo, consigan entender
mejor las expresiones de los personajes. Tiene poco texto y con figuras
gramaticales simples, y centrándose mas en las
ilustraciones, por lo que para los lectores que están empezado, es mejor
y más atractivo.
CONCLUSIÓN
Para finalizar con el análisis, me gustaría
comentar el uso que le daría al libro en el aula. Primeramente, la función
principal seria de reflexionar sobre la resolución de conflictos y lo que hace
Cuadradito y sus amigos, para conseguir entrar por la puerta de estos últimos.
Bajo mi punto de vista también podríamos trabajar el concepto del trabajo en
equipo y del compañerismo.
La edad de cuatro y cinco años es ideal para
este cuento, como he comentado en varias ocasiones, los principales temas que
se tratan, ya sólo porque es la edad donde se desarrollan, sino que adultos
de hoy en día, no los tienen. Me parece fundamental, que si no se trabajan en
esta edad temprana, a posteriori no los tendrán ni harán por tenerlos.
BIBLOGRAFÍA
Alonso,
P. M. (1998). El DESARROLLO EMOCIONAL INFANTIL (0-6 Años): PAUTAS DE EDUCACIÓN.
C.
Escudero, Á. (2012). Las etapas del desarrollo madurativo.
Papalia, D.E., Wendkos Olds,
S. & Duskin Feldman, R. (2001). Desarrollo
físico y cognitivo en la niñez temprana. En Papalia, D.E., Wendkos Olds, S.
& Duskin Feldman, R. (Eds.), Desarrollo Humano (pp. 237-275). Bogotá: Mc
Graw Hill.